En horas de la mañana de este viernes la familia González González dio cristiana sepultura a los restos de Enis Carolina, tras confirmarse científicamente que la osamenta calcinada encontrada en El Calichal, comunidad que colinda entre los sectores La Cañada y Zumurucuare de Coro, municipio Miranda, pertenecían a ella.
El miércoles 20 la hermana de Enis, recibió por parte del CICPC-Coro, los resultados de los análisis que indican que los restos encontrados entre el viernes 24 y sábado 25 de junio corresponden a la joven de 29 años.
Una vez culminado el protocolo respectivo, la familia González González pudo recibir los restos de Enis y llevarlos al cementerio municipal de Coro para sepultarlos.
Al confirmarse que la osamenta calcinada sí era Enis González, el CICPC continua las investigaciones para ahora determinar que la joven fue víctima de un feminicidio, delito que apunta como principal sospechoso a su expareja, «Momo».
Según las versiones de los familiares de González, su expareja la maltrataba física y psicológicamente, siendo motivo de separación hace siete meses.
No obstante, «Momo» acosaba a Enis y llegó hasta amenazarla al decirle: «Si no es para mí, no serás de nadie», por lo que ella lo había denunciado en dos oportunidades.
El acoso de «Momo» se torno más intenso al saber que su expareja y madre de sus 3 hijas, tenía una nueva pareja con quien había cumplido un mes de relación días antes del lunes 20 de junio cuando desapareció Enis, quien fue vista por última vez en el sector Zumurucuare, en casa de la abuela paterna de las niñas.
Desde el 24 de junio cuando se dio el hallazgo de la osamenta calcinada, «Momo» salió corriendo de casa de su madre, y está huyendo, acciones que a nivel de teoría presumen que Enis fue asesinada, descuartizada y quemada por su expareja.
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Fuente: Marianny Chiquito