Un joven de nombre: Marcelo Morales, quien tenía 23 años de edad y trabajaba como policía en Buenos Aires.
El ambiente alrededor de la ya de por sí abatida afición de Boca Juniors ha terminado mucho peor después de darse a conocer que un fanático decidió suicidarse después de que su equipo perdió 2-1 ante Fluminense en la final de la Copa Libertadores 2023.
Los reportes dados a conocer por diferentes medios argentinos indican que se trataba de un joven llamado Marcelo Morales, quien tenía 23 años de edad y trabajaba como policía en Buenos Aires. En días anteriores, de acuerdo con su madre, había avisado que se quitaría la vida si los ‘Xeneizes’ no ganaban.
"Si (Boca Juniors) perdía estaba mal, se ponía triste, pegaba piñas, decía que era lo más grande Boca. Boca es una basura. Me lo mataron. Yo ahora no lo tengo y no hay ningún jugador que me dé el pésame", mencionó la madre del aficionado horas después de su muerte.
El aficionado fue encontrado en su propia cama, sin señales de vida, lo que confirmó las palabras que había dicho unos días antes de jugarse la final en el Estadio Maracaná de Río de Janeiro; que se quitaría la vida si el conjunto argentino perdía el encuentro contra Fluminense, aunque en su momento parecía una broma.
"No pensé que mi hijo iba a llegar a ese límite de
matarse. Hace algunas semanas le había dicho al papá 'si Boca no gana el 4 de
noviembre yo me mato'. Pensamos que estaba haciendo un chiste. Que tomen
conciencia los jóvenes, que piensen en su familia", concluyó la madre de
Marcelo Morales, quien llevó su afición desmedida hasta las últimas
consecuencias.
Fuente:EFE