Lo mismo en una encuesta realizada por el Washington Post: el 47% tiene la intención de votar por Harris y otro tanto por Trump.
La candidata presidencial demócrata Kamala Harris y su rival
republicano, Donald Trump, aceleraron el paso en sus respectivas campañas este
lunes, en un intento por tomar ventaja en los sondeos, que los seguían
mostrando empatados en los estados clave a tan solo dos semanas para los
comicios en Estados Unidos.
Harris cortejó este lunes a los republicanos moderados en el
«cinturón de óxido» y Trump a los indecisos en zonas devastadas por el huracán
Helene en Carolina del Norte. La misión de ambos: romper el empate en las
encuestas.
En los siete estados clave para las elecciones
presidenciales (Pensilvania, Michigan, Wisconsin, Carolina del Norte, Arizona,
Nevada y Georgia) los últimos sondeos publicados el lunes por el New York Times
continúan dando a los rivales codo con codo.
Lo mismo en una encuesta realizada por el Washington Post:
el 47% tiene la intención de votar por Harris y otro tanto por Trump.
Harris, de 60 años, viajó a otros dos estados del este,
Pensilvania y Wisconsin, acompañada por la excongresista republicana Liz
Cheney, una adversaria a ultranza de Trump.
«No se trata de partido, se trata de lo que está bien y lo
que está mal», declaró Cheney, quien animó a la gente a «votar en conciencia».
Harris tras el voto de republicanos moderados
Harris se centró este lunes en buscar el voto de los
republicanos moderados.
Les dijo que presten atención a todo lo que Trump cuenta porque «es un hombre poco serio, pero las consecuencias de que sea presidente de Estados Unidos son brutalmente serias. Hay cosas que dice que serán objeto de sketches, risas y chistes, pero las palabras tienen significado».
Incluso en política exterior.
«Si Donald Trump fuera presidente, (el mandatario ruso)
Vladimir Putin estaría sentado en Kiev» porque se deja manipular por «favores y
halagos», afirmó Harris.
Trump dice «al presidente de Rusia que puede salirse con la
suya con lo que ha hecho» invadiendo Ucrania, insistió. «Mira el mapa, Polonia
sería la siguiente».
Y criticó el aislacionismo defendido por Trump, adepto del
lema «Estados Unidos primero» en cualquier circunstancia.
Endurecen críticas contra Trump y Vance
En estos comicios «tenemos la oportunidad de decir» que
«vamos a rechazar la crueldad», «la especie de vil vitriolo» y «la misoginia
que hemos visto en Donald Trump y JD Vance», su compañero de fórmula, afirmó
por su parte Cheney.
El campo demócrata ha endurecido las críticas contra el
expresidente y candidato republicano, a quien acusa de comportamiento errático.
El pasado fin de semana el millonario ha dejado
boquiabiertos a muchos con comentarios groseros, como cuando mencionó el
«increíble» pene del fallecido golfista Arnold Palmer y llamó a Harris
«vicepresidenta de mierda».
espués de tratar de seducir a los obreros el sábado y freír
patatas en un McDonald’s el domingo, el magnate de 78 años puso rumbo este
lunes a Carolina del Norte.
Teorías conspirativas y retórica antimigrante
En este estado devastado por el paso del huracán Helene repitió teorías conspirativas que acusan al gobierno del presidente Joe Biden y a la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA) de redirigir los fondos para desastres para traer migrantes ilegales y reforzar los votos demócratas
«Así que creo que es una vergüenza lo que pasó con FEMA, lo
que pasó con su esfuerzo de rescate (…) casi inexistente», dijo Trump,
flanqueado por funcionarios locales que no le llevaron la contraria.
Una retórica antimigrante que reiteró en un mitin, como hace
a diario.
Acusó a la vicepresidenta de traer «todos los días (…)
migrantes ilegales que están violando y asesinando a mujeres y niños».
Pero según cifras oficiales, en realidad la delincuencia
nacional ha disminuido y el número de crímenes atribuidos a migrantes es muy
bajo en proporción al de extranjeros en situación irregular.