“Una victoria más. Eso es todo lo que me importa ahora mismo”, indicó Freeman.
El tan esperado enfrentamiento Dodgers-Yankees en la Serie
Mundial podría terminar en un instante.
Freddie Freeman jonroneó por tercer juego seguido y Walker
Buehler lanzó otra alegría en la Serie Mundial para que los Dodgers de Los
Ángeles derrotasen el lunes 4-2 a los Yankees de Nueva York y tomar una ventaja
3-0 en la Serie Mundial.
Con su astro Shohei Ohtani jugando con el hombro izquierdo
parcialmente dislocado, los Dodgers están a las puertas de una barrida que no
asomaba en los pronósticos en este duelo entre los equipos que comandaron a sus
respectivas ligas esta temporada y que se han citado por el cetro del béisbol
por primera vez en 43 años.
Buehler y seis relevistas se combinaron para los Dodgers,
que están a las puertas de su segundo campeonato en cinco años y el octavo en
la historia de la franquicia.
“Una victoria más. Eso es todo lo que me importa ahora
mismo”, indicó Freeman.
Apenas un equipo en la historia de la postemporada ha logrado voltear un déficit 3-0 en una serie al mejor de siete. Esos fueron los Medias Rojas de Boston contra los Yankees en la serie por el campeonato de la Liga Americana de 2004.
Dave Roberts, el actual manager de los Dodgers, fue parte de
aquel conjunto de Boston. Como corredor emergente, fue protagonista de un
memorable robo de base en el noveno inning del cuarto juego para evitar la
barrida y encender una épica remontada.
Estos Dodgers, según Roberts, no necesitan recibir una
lección de historia.
“Ellos saben lo ocurrido hace 20 años, y lo que puede
pasar”, afirmó el piloto. “Todo es posible. Estos son jugadores que tienen
mucha hambre de ganar un campeonato, de un desfile. Nada se va interponer en
eso, nada”.
Y no perdió el tiempo el lunes al salir de una escena en el
Yankee Stadium
Freeman sacudió un jonrón de dos carreras en el primer acto.
Mookie Betts y el puertorriqueño Kiké Hernández aportaron sencillos
remolcadores. El brazo del jardinero izquierdo dominicano Teóscar Hernández fusiló
a un corredor en el plato.
“Cuando te toca jugar fuera de casa, hay que atacar temprano
para silenciar al público y fue lo que pudimos hacer en la primera entrada”,
indicó Freeman.
Los Yankees evitaron la blanqueada gracias al jonrón de dos
carreras de Alex Verdugo en la novena entrada.
Con su batazo ante un descontrolado Clark Schmidt en el
primer acto, Freeman empató el récord que George Springer fijó con Houston, al
conectar de jonrón por quinto partido consecutivo en la Serie Mundial.
Freeman se convirtió en el tercer jugador que conecta de jonrón
en los primeros tres juegos de un Clásico de Otoño. Hank Bauer (1958) y Barry
Bonds (2002) fueron los otros.
El cuarto juego será el martes. Tras haber empleado a sus
tres abridores sanos, los Dodgers ejecutarán su cuarto juego de bullpen esta
postemporada. El novato dominicano Luis Gil abrirá por los Yankees.
“Lo que nos corresponde es enfocarnos como equipo en ganar
ese juego mañana”, dijo Ohtani. “No hay nada mejor que tener esa oportunidad al
alcance”.
Nadie ha logrado barrer una Serie Mundial desde que los
Gigantes de San Francisco despacharon a los Tigres de Detroit en la edición de
2012. A la caza de un 28vo campeonato, los Yankees están al borde de ser
barridos por apenas cuarta vez en una Serie Mundial .
“Ojalá podamos ser los protagonistas de una increíble
historia y asombrar el mundo, pero hay que ganar uno primero”, dijo el mánager
de los Yankees Aaron Boone.
En el primer juego de un Clásico de Otoño en el Bronx desde
2009, el año del último título de los Yankees, los jugadores de Nueva York
tuvieron una breve reunión por la tarde. Derek Jeter, el cinco veces campeón de
la Serie Mundial, hizo el primer ceremonial de lanzamiento para enardecer a los
49.368 aficionados que colmaron el estadio.
Pero los Dodgers no tardaron en dar el primer zarpazo de la
noche.
Schmidt transfirió a Ohtani con cuatro lanzamientos para
iniciar el juego. Un out después, Freeman conectó una recta cortada en cuenta
de 1-2, viajando 355 pies hasta caer en el primer nivel de las grados del
bosque derecho para su 13er jonrón en la postemporada.
Tommy Edman, el noveno en la orden ofensivo de los Dodgers,
recibió otro boleto de cuatro lanzamientos por parte de Schmidt al abrir el
tercero y anotó tras un sencillo de Betts. Kiké Hernández añadió un sencillo
removedor en el sexto. Schmidt expidió cuatro boletos al cubrir 2 2/3 entradas.
La defensa de los Dodgers también se lució para abortar un
amago de reacción de los Yankees.
Betts se deslizó para llevarse una línea tendida de Jazz
Chisholm Jr, luego del doble de Giancarlo Stanton con un out en el cuarto para
el primer hit contra Buehler. El preciso tiro de Teóscar Hernández desde el
izquierdo, luego de un sencillo de Anthony Volpe, sacó en el plato a un lento
Stanton.
“Anticipas un poco la jugada sabiendo que no es uno de los
mejores corredores”, dijo Hernández. “Si ellos lo mandan, mucho mejor para
sacar el out”.
Nueva York logró anotar hasta que Verdugo jonroneó ante
Michael Kopech con dos outs en el noveno. Kopech bajó al telón al sacar a
Gleyber Torres con un rodado al campocorto.
Buehler toleró dos hits en cinco entradas, con cinco
ponches. En una temporada marcada por problemas físicos, no se había acreditado
una victoria desde el 18 de mayo ante Cincinnati. Ahora quedó con una marca de
2-0 y efectividad de 0.50 en tres salidas en la Serie Mundial.
“Es algo extraño, me crezco en los playoffs. Son los juegos que realmente me importan”, señaló Buehler. “Ha sido un año espantoso. Pero en los playoffs, todo cambia con la adrenalina. El temor que tenía con mi codo por tratar de hacer un determinado lanzamiento ha desaparecido”.