La Policía Nacional del Perú (PNP) indicó que tras ser
sometido a un intenso interrogatorio, el venezolano, José Miguel Espino
González de 22 años, confesó que planificó el crimen del cirujano plástico
Carlos Antonio Mendo Castillo de 35 años.
Espino González, quien era asistente de la víctima, estuvo
presente el día del asesinato del médico, ocurrido el 23 de febrero en el
distrito de El Agustino (Lima).
Las investigaciones permitieron identificar a los presuntos
implicados, descartando la hipótesis inicial de un asalto para confirmar que se
trató de un crimen planificado. De acuerdo a la versión de la PNP.
Según la policía , José Miguel habría planificado el
asesinato con antelación, contratando a un sicario para ejecutarlo a cambio de
3.800 soles (casi mil dolares). Además, contó con la participación de un menor
de edad, quien conducía la motocicleta utilizada para interceptar al cirujano
plástico en plena vía pública.
El crimen se llevó a cabo en una zona sin cámaras de
seguridad, lo que dificultó la obtención de pruebas visuales. Sin embargo, las
investigaciones criminalísticas permitieron esclarecer el caso. Durante el
operativo, las autoridades encontraron evidencias clave, como una prenda de
vestir que el principal sospechoso habría usado el día del asesinato, lo que
refuerza su presunta implicación en el homicidio.
De acuerdo con las pesquisas el móvil del crimen era el
interés del asistente del cirujano por “apropiarse de su dinero porque conocía
todo su movimiento económico”.